DESAFÍOS...

"...sólo los que se atreven a llegar lejos, son capaces de llegar a saber lo lejos que pueden llegar..."
T.S. Elliot

martes, 11 de enero de 2011

VETERANOS, ES COSA DE HOMBRES...

...de hombres que entrenan, añadiría yo.


El pasado domingo 9 de enero participé en mi primer campeonato como miembro de un club de atletismo. 
Se trató del  Campeonato Gallego de campo a través de Veteranos,   nada menos que  en Pobra do Caramiñal, en la playa y pinar de Cabío. Precioso, la verdad, hace años que no iba por esa zona y me sorprendí por lo bonita que es. 


El caso es que allá fuimos, compartí coche con dos superveteranos de ferrol, con más paciencia los dos que el santo Job, ya que un viaje hablando conmigo es un suplicio (¿que? ¿cómo dices? ¿einnn? son mis frases mas repetidas en coche, jaja). Yo iba con mis nervios habituales en las carreras y encima "acongojadito" por el berenjenal donde me metía. 

"¡Bah! no es para tanto", intentaba convencerme, "suelo entrenar por el pinar y corro bastante por la playa", me decía a mi mismo, "ya he hecho buen papel en varias carreras y 7 km y medio no son para tanto" ¡ja!, ¡madre mía la que me esperaba!. 

Encima iba medio febril, totalmente dopado por los antibióticos y el ibuprofeno y, para rizar el rizo, iba a correr con unas zapatillas de clavos por primera vez en mi vida y encima sin ser mías, vamos, casi clavo el apartado de "como no debes participar en una carrera" de cualquier manual del corredor. 


Primera lección:  Un campeonato no tiene nada que ver con una carrera popular. Se disfruta tanto o más (en este caso fue un día perfecto) pero el nivel de los competidores es infinitamente más alto.  En mi categoría estaba hasta Alejandro Gómez, (foto) que participó en Seul 88, Barcelona 92 y Atlanta 96, además de ser plusmarquista en Maratón por encima de Martín Fiz, nada menos y premio Príncipe de Asturias. Vamos, que me codeo con quien no debo, jaja. 

Segunda lección: No todos los pinares son iguales. ¡Qué cantidad de quiebros, cambios de ritmo, cuestecillas, arena incómoda! 
Tercera lección: Creo que no se debe participar en algo serio estando a tratamiento médico. Si llevaba una semana flojo, el domingo fue el colofón. Hay que cuidarse y dosificar. 


Cuarta lección.- ¡Qué gente más estupenda se conoce en estos temas!. No me cansaré de repetirlo, llamadme mimosín, pero da gusto sentirse apoyado y que te hagan caso todo el rato. Los gritos de ánimo que me dieron en todo momento tanto mis compañeros como el público que había por allí son como una dosis de energía en vena. Se agradecen, de verdad. Si alguien que lea esto va a ver o simplemente se topa con una carrera en su camino, por favor, que aplauda a los corredores aunque la cosa ni les vaya ni les venga. Ayuda mucho. Reconforta. 

Y moraleja de todas las lecciones:  Hay que entrenar, entrenar y entrenar.  Por todas las superficies, con  muchos cambios de ritmos, hacer series, darle caña, en resumen. 

En ningún momento me encontré cómodo ni con mis piernas ni con mi ritmo de respiración, las zapatillas me destrozaron los gemelos y al día siguiente aún me dolía todo. Antes de la mitad del recorrido pensé en retirarme, pero luego  decidí no obsesionarme con el tiempo y disfrutar de la experiencia. Llegué a meta con la impresión de haber hecho la peor carrera de mi corta vida atlética, la verdad. Aunque luego, fríamente, viendo los resultados y calculando el tiempo invertido en el recorrido, no lo hice tan mal, a 4.17 el km siendo la primera vez y sin encontrarme bien no se puede decir que sea un fracaso.


Menos mal que el compañero Tom hizo un carrerón, como viene siendo habitual y si no puntuó fue por falta de más miembros el equipo en nuestra categoría. Para eso estaban los veteranos mayores, que sí que triunfaron e hicieron que el Club subiese al podio al final, medalla de bronce a falta de un punto para la plata. 


(Solo por estas fotos vale la pena el sufrimiento)

Ni que decir tiene que me subí al podio muerto de risa a hacerme la foto de rigor. 

Después comida rica en buena compañía y paseito por Pobra al solecillo de enero. Una maravilla.  Resultado, un día atlético casi perfecto (aunque si hubiese hecho mejor carrera, sería perfecto ). Domingo distinto a los habituales, lecciones aprendidas para el futuro  y unas fotos publicadas por ahí que solo por ellas ya merece la pena el sufrimiento de piernas. 

La vida sigue igual, bastante trabajo, bastante deporte, España sigue en el paro y, por fin, los días se alargan poquito a poquito. Ánimo a todos y a seguir mejorando. 

3 comentarios:

  1. Con el tema de la muela y el dolor, y toda la medicación lo hiciste muy bien Miguel!

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  2. Gracias Ton, sigo un poco pachucho, a ver si acabo con los antibióticos y nos ponemos las pilas. Un abrazo.
    MIGUEL

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  3. Estupenda carrera y bonitas fotos. Alejandro Gomez hizo una gran media en mi ciudad, Málaga. Batió record. Saludos

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