Coming dawn in a sunny day? (Creedence clearewater revival)
Oséase, ¿Has visto alguna vez la lluvia cayendo en un día soleado?. Pues sí, sí, hoy mismo. Vaya diluvio nos ha caído encima. Impresionante. El día amaneció soleado, con un calor de mil demonios. A las 10 fui a misa (uno es así, no le oigo ni la mitad al cura, pero voy) luego desayuno rapidito en el bar de la esquina con un amiguete mientras su hijo se afanaba haciendo los deberes y a las 11 ya estaba yo paseando playa arriba y playa abajo, sudando la gota gorda, caminando con el agua a la altura de los muslos para intentar mantener la forma mientras mis compañeros corredores me pasaban una y otra vez por al lado a toda pastilla, los cabritos.
Luego dos o tres horas de playa, la mar de amenas a pesar de no poder nadar y tal hasta que de pronto....¡brrrrrrrrrrrroooooooooooom!!! la tormenta perfecta y el diluvio universal, todo junto y revuelto (jeje, un poco exagerado quizás sí que soy). Menos mal que me pilló justo al llegar a casa.
Así que tocó tarde casera, siestita y a disfrutar de la victoria de Contador en el Giro de Italia (qué tío, tres tours, dos giros y una vuelta a España después de superar una grave operación) y a seguir los resultados de la fase de ascenso de tercera división a segunda B, a ver si lo consiguen el Racing de Ferrol y el Cerceda, ya que el entrenador Manuel es mi amigo.
Con el brazo en cabestrillo (ya queda menos) ayer fui a animar al super atleta Tom y a otros conocidos que participaban en el triatlón de Oleiros. era uno de mis objetivos este año, pero no pasa nada, ya participaré en algún otro triatlón más "popular", que por lo que vi ayer en este hay bastante nivel. Me mordía las uñas viendo a la gente nadar, pedalear y correr, encima hacía un día estupendo y el ambiente era fantástico. Y ahí estábamos la compañera coja (pié roto corriendo) y yo manco (codo roto corriendo), sin poder participar pero disfrutando de la prueba. Me dicen hace año y medio que me perdería una tarde de playa por ver un triatlón "del montón" y no me lo creo, pero ahí estábamos, este deporte engancha. En 10 días tengo cita con el traumatólogo, espero que me de buenas noticias, empiece pronto la rehabilitación y pueda empezar correr otra vez, a estrenar el nuevo codo nadando (eso lo veo más difícil) e incluso participar en alguna carrerita en verano.
Mañana empieza otra semana intensa de trabajo, con varios plazos ajustados al milímetro. Mis amigos no me creen cuando digo que estoy deseando ir al trabajo, ¡es que lo disfruto!. Quedan menos de 3 meses de contrato, y no pienso desperdiciar ni un día.
Ahora a descansar y a esperar que mañana no llueva. Me despido con la canción que da título a la entrad a de hoy, que es bonita, bonita.
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