DESAFÍOS...

"...sólo los que se atreven a llegar lejos, son capaces de llegar a saber lo lejos que pueden llegar..."
T.S. Elliot

viernes, 30 de diciembre de 2011

Brindemos con una buena copa de bondad


Mañana ya es nochevieja, la noche de las "empanadillas de Móstoles" de Encarna y martes y Trece. Es increíble lo rápido que pasa el tiempo. Parece que fue ayer cuando escribí esta entrada que aún me hace sonreír cuando la releo, pero ya ha pasado un año ¡y qué año! ha habido de todo, como siempre. Cosas positivas, cosas negativas, desengaños, descubrimientos, novedades, reencuentros.... Ahora que pasó creo que debemos quedarnos con lo bueno (mucho) y aprender de lo malo (mucho también, pero ya está, qué demonios, "prueba superada"). 

En lo personal me quedo con un recuerdo imborrable del trabajo de que disfruté todo 2011, es una de las cosas más destacables para mi este año, así de triste es mi vida (es broma). El otro día me dijo una amiga que era "un masoca" por divertirme en el trabajo pero en este caso ¡no puedo evitarlo!. Se que suena a peloteo, pero no hubo ni un solo día que fuese al trabajo sin ganas, y eso es impagable. Cambiaré de trabajo en breve pero no olvidaré ni a mi jefe ni a mis compañeros de estos últimos  12 meses lagos.


Por supuesto, durante este año que acaba continué con las buenas costumbres que comencé en 2010, gente que me me ha conocido en los dos últimos años no conciben que no lleve muchos años siendo un corredor popular, no les cabe en la cabeza. Ayer mismo los compañeros de trabajo me regalaron un poster/felicitación de año nuevo con un Papá Noel triatleta y unas dedicatorias llenas de referencias a carreras, objetivos e incluso lesiones. 

Pero el tiempo pasa y el 2011 queda atrás. Unas horas más, doce campanadas y empieza 2012, el fin del mundo según algunos, el comienzo de una nueva vida para otros. Un año lleno de cambios y oportunidades para mi, según parece. Dicen que me lo merezco, yo no soy el más indicado para decirlo, pero bueno, aprovecharé la oportunidad que parece que se me presenta, que ya se sabe que la oportunidad la pintan calva.  
Por lo pronto, mañana despediré el  año de un modo muy propio. San Silvestre en Mugardos por la mañana (10.000 metros rodeado de amigos) y San Silvestre vespertina en Coruña, organizada por el Club Rialto (7.700 metros rodeado de ¡1000 personas!), medio lesionado y agotado tras una semana de mucho trabajo y poco sueño. Supongo que el día uno no podré moverme pero, que me quiten lo bailado. 

No me extiendo más, solo escribo esto para desearos a todos, de verdad de la buena, un año nuevo muy feliz y lleno de alegría, oportunidades, trabajo, salud, amor y, por supuesto, ¡carreras!. Feliz año nuevo, empiezan 365 días en los que hay mucho camino por andar
No puedo evitar compartir la famosa canción escocesa que suelen cantar los anglosajones en nochevieja y, siendo un aspirante a George Bailey (James Stewart) pongo la versión de ¡Qué bello es vivir!. Como dice el angelote Clarence: "recuerda que ningún hombre fracasa si tiene amigos". Así que nada, nada, a hacer amigos nuevos y conservar los antiguos y, como dice la canción (algo tristona, pero bonita): BRINDEMOS CON UNA COPA DE BONDAD. 

Mis mejores deseos, amigos, de verdad que sí. 


2 comentarios:

  1. Te deseo lo mejor para el año nuevo Miguel!!! No sé por que, pero creo que habrá entrenamientos duros y tiradas muuuy largas... Un abrazo!!!
    J. Damiá

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  2. Nada, que me voy a acostumbrar a leer tu blog con un paquete de kleenex en la mano...
    Un abrazo!

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